La clasificación de hospitales se hace de acuerdo a la capacidad resolutiva, su función dentro de la red, los servicios de apoyo que ofrece y la especialización de los profesionales. En este sentido, el Hospital infanta Elena entraría dentro de los hospitales de baja complejidad, es decir, aquellos que acercan la salud a la población, principalmente en zonas extremas y con alta ruralidad. Dan cobertura a toda la población de su jurisdicción en prestaciones de baja complejidad y dependen administrativamente del Servicio de Salud al cual pertenecen.
Dentro de este grupo, el Infanta Elena aparece como el segundo mejor puntuado en líneas generales, solo por detrás del Hospital del Escorial, aunque supera a este último en la valoración de sus consultas externas. Por otro lado, el 83,85% de sus usuarios se muestran también satisfechos con la atención de las urgencias y de igual modo lo hacen el 95,03% de los hospitalizados.
El centro hospitalarios de Valdemoro también destaca en comparación con el resto de hospitales de baja complejidad en cuanto a tiempos de espera, señalización, profesionalidad de los especialistas y tiempo que estos les dedican a los pacientes, entre otras cuestiones.
Desde el Hospital se muestran muy satisfechos con estos datos y señalan que a estas buenas valoraciones habría que añadir que además, el Infanta Elena figura como uno de los centros de baja complejidad con menor lista de espera, tanto quirúrgica, con un promedio de 10,16 días, como de consultas externas, donde la demora media se sitúa en tan solo 8,77 días.
Fuente: zigzagdigital.com
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