"Lleva mucho tiempo y trabajo hacerlo", afirman desde el sindicato Acaip, que también denuncia que los residentes del centro penitenciario llevaban semanas echando en falta sábanas. El preso fue confinado a una celda de aislamiento y, al día siguiente, protagonizó un altercado con un funcionario al que le rompió los dedos.
Sorprende cómo el recluso pudo hacerse con tal cantidad de sábanas: "Ha pasado por muchos módulos de la prisión donde ha podido robarlas o que se las dejaran", explican desde el sindicato. El intento de fuga descolgándose de este modo, aunque peculiar y teatral, no es una novedad en la cárcel de Valdemoro. Hasta tres intentos de este tipo se recuerdan, tratando de saltar el muro de siete metros, en los que los fugados sólo lograron romperse varios huesos. Precisamente en julio del año pasado hubo un intento exactamente igual en Málaga.
Un dato mucho más alarmante, tal y como asegura Acaip, son los 40 internos que se han fugado saliendo a pie entre enero y octubre de 2012. De ellos sólo 13 han sido capturados, el resto permanece en busca y captura, salvo uno que murió atropellado en la autovía M-50.
