Valdemoro estudia la implantación de cámaras de videovigilancia en el municipio



El alcalde de Valdemoro, David Conde, ha dado delante de micrófonos un repaso de la actualidad municipal cuatro meses después de haber tomado posesión como regidor de la localidad.

Conde ha admitido que se han encontrado “un ayuntamiento sin procedimientos de contratación, con una ausencia de personal y medios técnicos, contratos inexistentes, empresas que no cobraban y dejaban de prestar servicios…”. Pero el alcalde ha defendido que en estos primeros meses se han dedicado a adecuar todo aquello que “tiene que hacerse por ley” y a garantizar la estabilización del Ayuntamiento, por lo que augura que tras este periodo el gobierno local se pueda “dedicar al crecimiento de la ciudad”.

En ese sentido destaca la reciente aprobación de los presupuestos municipales para este año, unos presupuestos “técnicos” que buscan actualizar la situación de la localidad y dotar algunas partidas presupuestarias necesarias para hacer funcionar el consistorio. Por eso quieren trabajar ahora “en unos presupuestos más ambiciosos para 2024” que contarán con inversión en materia deportiva o cultural, aunque ha preferido no aventurar cuestiones que aún no están cerradas.

Sí ha adelantado que están trabajando en la instalación de cámaras de videovigilancia en materia de seguridad ciudadana, tanto en entradas y salidas de Valdemoro como en el centro urbano o en polígonos industriales, entre otros puntos que aún no están completamente definidos. Dicho proyecto contaría con cobertura presupuestaria en 2024, pero debe pasar también por la aprobación de Delegación de Gobierno.

A lo largo de la entrevista Conde también ha abordado la próxima aprobación del contrato de limpieza viaria y mantenimiento de zonas verdes o las próximas reuniones con Comunidad de Madrid y Gobierno de España para reclamar el nuevo centro de salud, el nuevo instituto del barrio del Hospital, la mejora de la C-3 de Cercanías o la implantación de la Zona de Bajas Emisiones.







Fuente: cadenaser.com

Cerca de 78.000 euros en reponer contenedores quemados en lo que va de año en Valdemoro



La quema de contenedores de residuos en Valdemoro se está convirtiendo en un problema y en un gasto considerable. El alcalde, David Conde, ha denunciado la quema de otros dos esta madrugada y ha alertado de que en lo que va de año ya han sufrido este tipo de vandalismo 26 contenedores. Se da la circunstancia de que a menos de tres meses para terminar el año, se han quemado 4 contenedores más que en el 2023, con el consiguiente gasto para las arcas municipales que esto supone. La mayoría de las veces es por actos vandálicos, aunque también se han dado algún caso de quema tras arrojar en ellos restos de brasas, mal apagadas, de alguna barbacoa.

Y es que según Conde, cada vez que el Ayuntamiento tiene que reponer este elemento y acondicionar la zona se emplean unos 3.000 euros “que salen de los bolsillos de los vecinos de Valdemoro”, tal y como indica en un video subido a la red social del Consistorio. Esto supondría, que este año para reponer los 26 contenedores incendiados se ha gastado el gobierno municipal cerca de 78.000 euros.

Ante el gasto, nada desdeñable, el alcalde ha optado por lanzar este video pidiendo la colaboración ciudadana para que si detectan este tipo de comportamientos lo denuncien y avisen a la Policía Local, además de concienciar a todos en que el dinero para reponer el contenedor “sale del bolsillo de todos”. Conde pide a los valdemoreños ser “conscientes de lo importante que es esto para mantener la ciudad limpia y en orden”.





Fuente: cadenaser.com

Aprobada la Ordenanza de Incendios de Valdemoro que permitirá un importante ahorro para las arcas municipales



El pleno municipal de Valdemoro ha aprobado por unanimidad la nueva Ordenanza Fiscal Reguladora de la Tasa de Mantenimiento del Servicio de Prevención y Extinción de Incendios y Salvamentos de Valdemoro que supondrá a las arcas municipales un ahorro de más de 2 millones de euros.

En este año, la tasa que abona a la Comunidad de Madrid el Consistorio por este servicio supone 2.400.476,30 euros, la misma cantidad que el pasado año. Cuando en 2024 entre en vigor la nueva Ordenanza las aseguradoras del municipio obligará, “en su calidad de sujetos pasivos sustitutos el contribuyente”, a sufragar parte de la cuantía que de forma anual paga el Ayuntamiento por este servicio al gobierno regional. El alcalde, David Conde, destacaba como este dinero se podrá repercutir en mejores servicios para los vecinos y ha señalado el tiempo récord que se ha empleado para tener en marcha esta Ordenanza.

“Los cálculos realizados de la cuota tributaria, a satisfacer por las 73 entidades o sociedades aseguradoras que operan en Valdemoro, se basan en el volumen de primas del seguro de incendios sobre riesgos localizados en cada término municipal”, afirman desde el Consistorio. Estas entidades son las encargadas de facilitar esta información de forma anual, según el acuerdo entre la Federación Española de Municipios y Provincias, FEMP, y el Consorcio de Compensación de Seguros.

Según la estimación realizada por el Ayuntamiento para establecer la cuota a pagar en 2023 por estas sociedades, el montante total ascendería a 2.160.428,67 euros, una cantidad que supondrá rebajar a 240.047,63 euros el importe que en el futuro deberá abonarse a la Comunidad de Madrid.

El PP ya presentó en 2022 una proposición, que se aprobó por unanimidad en el pleno, para estudiar la viabilidad de implantar una ordenanza fiscal que obligara a las aseguradoras a abonar una cuota para mantenimiento del servicio de prevención y extinción de incendios en base a una sentencia del Tribunal Supremo. Este Tribunal desestimó el recurso de casación sobre este tema, presentado por varias aseguradoras.






Fuente: cadenaser.com

El Club Inter cumple 40 años metiendo goles en Valdemoro





Corría el año 1983. Felipe González afrontaba su primera legislatura con mayoría absoluta y los vecinos de Valdemoro estaban llamados a elegir al que sería su segundo alcalde de la democracia. En el solar en el que en la actualidad se levanta el parque de la Comunidad de Madrid, un grupo de jóvenes en situación de desempleo se reunía para matar el tiempo dándole patadas al balón, ajenos a que ese sencillo gesto de puro entretenimiento sentaría las bases del que hoy es el equipo de fútbol en activo más antiguo de la localidad, el Club Inter de Valdemoro.

En las cuatro décadas que han pasado desde esos primeros encuentros entre amigos, el fútbol se ha convertido en un deporte que mueve millones, protagoniza casos de corrupción y alimenta debates sobre consentimiento con escenas como la vivida en la final del mundial con el beso de Luis Rubiales a Jenni Hermoso. Y Valdemoro, localidad que vio nacer y crecer al club, ha pasado de ser un pueblo de apenas 14.329 habitantes a convertirse en una ciudad con 79.100 vecinos empadronados en 2022, donde la cantidad y calidad de instalaciones deportivas no ha crecido al ritmo al que lo ha hecho la población.

Al igual que sus amigos, en el verano de 83, Casildo Portugués (1964) era sólo un chaval de 19 años que no encontraba ninguna oportunidad laboral. “Nos gustaba mucho juntarnos para jugar y decidimos apuntarnos a un torneo de verano del Ayuntamiento, buscando un sentido al tiempo que pasábamos dándole patadas al balón. Pusimos cada uno 20 duros de las antiguas pesetas y pagamos unas camisetas”, recuerda el actual presidente del Inter de Valdemoro, el único de esos primeros jugadores que continúa al pie del cañón.

Para su puesta de largo como equipo escogieron el nombre de Interparados. “Todos estábamos en paro y en ese momento el Inter de Milán era el equipo que ganaba en Europa. Como color elegimos el naranja, porque sólo teníamos una equipación y así era más difícil coincidir con la de otro equipo”, continúa recordando Portugués en la sede actual del club frente al polideportivo del Restón.

Primera imagen del equipo, cuando aún se llamaba Interparados (1993),

Tras el éxito del torneo, el grupo se apuntó a las ligas locales de Valdemoro y Pinto, donde continuaron destacando y llegaron a ganar una copa que organizaba el diario As. Y fue en 1991, al comparar los gastos de volver a competir en los torneos con los que suponía federarse, cuando tomaron la decisión de empezar a jugar en tercera regional. “Subimos en ese primer año a Segunda, volvimos a bajar… Y alcanzamos la Primera Regional, división donde nos hemos mantenido durante años con jugadores del pueblo”.

La cantera nació con los primeros estertores del siglo XXI, cuando esos jóvenes de los inicios, que ya eran padres, empezaron a poner sobre la mesa la idea de crear algún equipo de niños en el seno del club. En frente, en pleno crecimiento de sus conjuntos inferiores, se encontraron la voluntad del Partido Popular de Francisco Granados de unificar el fútbol en Valdemoro, un escollo que no impidió que el Inter continuase su andadura, contando con un total de 27 equipos en la temporada que acaba de comenzar.

El sueño de su directiva es lograr tener un equipo en Tercera División —ahora llamada Segunda Federación—, categoría en la que militó durante doce temporadas el desaparecido Atlético de Valdemoro y que ningún equipo del municipio ha vuelto a alcanzar desde su descenso en la temporada 2001/2002. “Es una localidad que lo merece”, apunta Andrés Gómez (1959), compañero de lucha de Portugués como director deportivo del club, afincado en Valdemoro desde hace diez años. “He entrenado en Madrid, en Castilla La Mancha… Y nunca he visto un pueblo más complicado que este”.

Unas instalaciones que no están a la altura

La temporada pasada, la Real Federación de Fútbol de Madrid (RFFM) se vio obligada a tomar la decisión de cerrar el campo de fútbol del Restón ante el mal estado en el que se encontraba su césped artificial. Los desperfectos ya habían sido señalados con anterioridad por el propio Portugués, pero las medidas, como suele ocurrir en este tipo de situaciones, no se tomaron hasta que un niño se rompió la tibia al tropezar con las líneas desgastadas.

“Ahora se puede jugar con los arreglos que hicieron para volver a abrir el campo, pero sigue habiendo mucho por hacer. El otro día tuvimos una reunión con el concejal de Deportes y le señalamos los desperfectos y ciertas cuestiones que consideramos que deben mejorar, ya no por nosotros, sino por los niños que vienen a jugar”, explica Gómez, sin esperanzas de que el cambio del equipo de gobierno se traduzca en un aumento de las inversiones en las instalaciones del municipio.

Líneas deterioradas del campo de fútbol antes de su arreglo 
Img: Club Inter de Valdemoro

Solicitan que se proteja todo el perímetro para evitar golpes, se repare la red que sujeta la portería, se arregle el riego y se ponga solución a la falta de agua caliente en varios espacios. “Imagínate la imagen que damos como club y como pueblo, teniendo que decir a la gente que viene de fuera que no se puede duchar”, continúa el director deportivo.

Lo que más indigna a ambos directivos es que, independientemente de los desperfectos presentes en las instalaciones municipales, cada temporada tienen que pagar cerca de 17.000 euros por usarlas, sin conserje encargado de su vigilancia, apertura y cierre —hay una persona del club que cumple voluntariamente con estas labores— y existiendo en otras localidades del entorno convenios y cesiones a los conjuntos locales.

“Yo cuando llegué aquí quería tener los equipos para poder entrenar tres días a la semana. Aprendí que al Ayuntamiento no le importaba que tuvieses un conjunto en buena categoría, que daba los espacios según el número de equipos. Si tienes 27, como tenemos, pues 27. Y así”, expresa Gómez, describiendo a Valdemoro como “el huerto” de la zona sur de Madrid. “Hay un gran nivel de deportistas que no tienen el respaldo político que merecen. En cuanto crecen, se van porque aquí no tienen las instalaciones adecuadas o el tiempo suficiente para entrenar”.

Independientemente de las dificultades económicas que han podido atravesar, al no recibir ayuda municipal alguna y tener que pagar por entrenar en el campo, en el club siempre han tenido claro que ningún niño se puede quedar sin jugar. Cuentan con descuentos para familias numerosas y evalúan personalmente la situación de cada familia. “Sus hijos tienen que venir a entrenar y eso no es negociable. Antes teníamos psicóloga, nutricionista, fisio… Son cosas a las que hemos tenido que renunciar porque no tenemos con qué pagarlo”, aseguran los miembros de una directiva a la que se le hace “muy duro” tener que pedir colaboración y patrocinios a las empresas del pueblo.

Andrés Gómez y Casildo Portugués, frente a la sede del Club Inter de Valdemoro.

Sin instalaciones para los cinco clubes de fútbol

Valdemoro cuenta en la actualidad con cinco entidades dedicadas al fútbol base: el Club Inter de Valdemoro, la Escuela Municipal de Fútbol, el Ívero, el Valdemoro Club de Fútbol y la Escuela Miles. “Acumulamos unos 3.000 niños entre todos e intentamos que el reparto de espacios sea ecuánime”, sostiene Gómez, consciente de que a la escasez de instalaciones se suma la circunstancia de que todos los equipos quieren la misma franja horaria.

Las condiciones obligan a que el conjunto absoluto del Inter, que esta temporada milita en Primera Regional, entrene en medio campo. “Si todavía tuviese mayores dimensiones, pero es que al final ves a adultos jugando en una superficie de unos 40 metros cuadrados”, lamenta el director deportivo. “Es lo mismo que nos pasó cuando subimos con el juvenil a Primera División Autonómica. Era inviable que estuviésemos entrenando en medio campo, dos días a la semana, para competir con el Getafe, el Fuenlabrada, el Atleti… Lo mínimo es contar con los mismos medios”.

Cualquier otro club hubiese decidido abandonar en lo que parece una lucha constante por salir adelante, pero Portugués está decidido a seguir apostando por la mejora y el crecimiento del proyecto deportivo que empezó a dar sus primeros pasos cuando él tan sólo era un chaval. Sin ir más lejos, el presidente tiene en mente volver a contar con un equipo femenino tras la gran repercusión que la victoria mundial de la selección ha tenido en la sociedad. “Ya tuvimos un conjunto formado por jóvenes de Valdemoro, Parla, Pinto, Aranjuez… Pero nos costaba mucho encontrar a jugadoras”, explica, recordando que la portera del DUX Logroño, Natalia Expósito, llegó a portar la camiseta del Inter en sus inicios como jugadora.

Fiesta y exposición de aniversario

Para celebrar su cuarenta aniversario, el Club Inter de Valdemoro ha organizado una fiesta el viernes 13 de octubre en la sala The New. Los asistentes disfrutarán de un tributo a Joaquín Sabina, a partir de las 22.00 horas, y de sesiones DJ de música de los años 80 y 90.

Las entradas, a 12 euros con consumición, se pueden adquirir con antelación en la sede del club en la calle Febo, 3. “El Ayuntamiento nos dijo que iba a colaborar, pero al final resulta que no puede”, apuntan los directivos, conscientes de que esta es una muestra más de la falta de apoyo institucional al deporte base.



El club también ha solicitado contar con el espacio de exposiciones del centro comercial El Restón, para poder exhibir una muestra de fotografías del 2 al 9 de noviembre, invitando a sus vecinos a realizar un recorrido en el tiempo por las idas y venidas de un equipo que espera poder celebrar, en el 2063, otros 40 años más de historia.








Fuente: zigzagdigital.com

El Pleno de Valdemoro aprueba dos proposiciones del Grupo Socialista sobre Educación



La primera de ellas va dirigida a retomar e impulsar el acuerdo entre el Ayuntamiento de Valdemoro y la Universidad Complutense y establecer en la parcela cedida el Campus Sur de Ciencias de la Salud en 2024, que contempla las Facultades de Enfermería, Fisioterapia y Podología.

Por otro lado, se aprobó también una iniciativa en la que se proponía realizar un estudio de las inquietudes educativas y formativas de los jóvenes de Valdemoro. El objetivo es poder después ajustar la oferta de Educación del municipio a las necesidades de los estudiantes del municipio para establececer una oferta adecuada.

El portavoz del Grupo Socialista, Vicente López Roncero, ha explicado que, de esta manera, “podremos luchar contra el abandono escolar a la vez que podremos canaliza de manera adecuada los talentos e inquietudes de nuestros jóvenes pudiendo ofrecerles grados de formación profesionales y opciones de bachillerato que están demandando. No se pude frenar a un alumno que consigue estudiar lo que quiere y esto tendrá una gran repercusión en la ciudad, a nivel social, económico, cultural y educativo».







Fuente: alcabodelacalle.es